“Somos una sociedad acostumbrada a no
disfrutar de al menos siete u ocho horas de sueño, que sería el ideal. Dormir
solo seis horas [o menos] definitivamente afecta tu habilidad para interactuar
con los demás. No solo en tus cambios de humor, sino también la forma como
filtras sus expresiones. Puede que estés respondiendo de una manera incorrecta
cuando, en principio, no estás interpretando correctamente la expresión de
quien tienes enfrente. Esto puede causar problemas en tos relaciones o tu
trabajo. Ése es el conflicto más importante de la falta de sueño, que afecta
tanto a tu organismo como tu desempeño social y afectivo”, dice el Dr. William
Killgore en un estudio realizado por la Universidad de Arizona, publicado en la
revista de “Neurobiología del Sueño y Ritmos Circadianos”.
Resultado principal del
estudio es que la habilidad de diferenciar las expresiones de alegría y tristeza
comienza a disminuir.
El estudio muestra claramente que la interpretación que hacemos de otras emociones como la rabia, el miedo, la sorpresa
y el asco no se ve afectada, La teoría
indica que estas cuatro últimas emociones están codificadas mucho más profundamente
en nosotros para efectos de supervivencia ante peligros y que la alegría y la
tristeza son emociones más “sociales” y menos necesarias para proteger nuestra
supervivencia.
Sin embargo, es importante
considerar que tu habilidad para detectar emociones en el rostro es una de las
habilidades más importantes para tu desempeño profesional y tu vida diaria y,
por ello, dormir el número de horas y con la calidad de sueño adecuada, se
convierte en algo muy importante para tu desarrollo exitoso como ser social.
Dedica el tiempo necesario
para tu descanso y suplementa tu alimentación para eliminar las toxinas que
están afectando tu capacidad de conciliar un sueño óptimo para una vida plena y
feliz.
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